
En estos carriles, las intersecciones con otras vias están bastante bien señaladas y, por lo general, disponen de unos semáforos específicos para bicicletas. Esto hace que la circulación por los mismos sea bastante segura aunque, como siempre que nos desplazamos en bici por la ciudad nunca debemos relajar nuestra atención.
Surgieron hace unos años como complemento al plan ideado por el famoso Boris J (el alcalde conservador! de Londres) para introducir las bicis en la ciudad y fomentar, sobre todo, los desplazamientos diarios al trabajo en un medio alternativo a los vehículos a motor. El objetivo era conseguir unas rápidas vías de acceso al centro en bici desde fuera de la ciudad para aliviar, entre otras cosas, el denso tráfico y la polución que sufría Londres.
Por lo general, se tratan de una combinación de arcenes muy anchos y vias específicas , a veces compartidos con el carril bus en los tramos muy saturados del centro. En ciertos casos, como en la CS3, el carril bici es, en la mayor parte del recorrido, totalmente independiente de la calzada por la que discurren los vehículos a motor.
Hay que decir que, como norma general, por estos carriles bicis sólo circulan bicicletas y es muy raro encontrase con el típico peatón (andando por el carril bici) y el consiguinete conflicto con los ciclistas, que se suele dar en España.
Me imagino que es por una cuestión de civismo, de la que tanto presume la sociedad inglesa.
El "council" de London tiene un plan de apliación y extensión de las mismas (sometido ahora miso a la muy decisiva consulta pública) ya que lo cierto es que son un éxito. Durante las semana las verás muy transitadas por todo tipo de "commuters" en sus variadas bicicletas, aunque es precisamente durante el fin de semana cuando más podrás disfrutar de ellas.
Os dejo aquí un enlace a una ruta que en su día hice en bici para explorar una de ellas (la CS3)..
http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=2586800